Los ojos son un tema común y recurrente en la obra de Carlos Luna, que refleja tanto el ojo vigilante del gobierno como el de Elegguá, la deidad yoruba que observa e informa la locura y los logros humanos a lo largo de nuestro viaje entre mundos. Aquí, Luna enfatiza que la naturaleza misma es un observador –un gobierno universal– que nos hace responsables de nuestras interacciones con ella. Estampado en cada brazo, se nos recuerda que todo lo que creamos por necesidad, comodidad y conveniencia proviene de esta fuente y que, por lo tanto, somos responsables de su preservación.
Con fibras totalmente naturales, el Watchers Knit Crop acentúa la forma humana cortando a mitad del torso y siguiendo la curvatura de la cintura.